Innovar

Desarrollar experiencias piloto para estimular el impacto social

Desde su creación, la Fundación se ha hecho cargo de ciertas cuestiones sociales marginalizadas o poco tratadas por falta de medios. Se trata principalmente de la escolarización de los niños en el medio rural, de la integración económica del mundo rural o incluso de la cuestión de la discapacidad. Guiada por la exigencia de solidaridad y la necesidad de actuar, la Fundación ha hecho de ellas los temas prioritarios en sus intervenciones. Además del apoyo inmediato que activa para estas cuestiones, introduce nuevas formas de tratarlas.

Casas de acogida para la lucha contra la desescolarización en el medio rural (Dar Taliba), programa de desarrollo integrado para el medio rural, plataforma de asistencia integral para los discapacitados (CNMH), centros de formación por oficios, especialidades inéditas..., son algunos ejemplos de iniciativas que caracterizan su enfoque social. Un enfoque basado en la experimentación y la duplicación.

La Fundación inicia proyectos piloto y se asegura de su funcionamiento (existencia de asociaciones gestoras, fiabilidad de las fuentes de financiación, marco regulador). Anima así a otros agentes (mecenas, departamentos ministeriales, socios...) a coger el relevo y a duplicarlos a escala nacional o regional.

Otros modelos de proyectos piloto:

Programa Nacional de Lucha contra las Conductas Adictivas
Centro de Día Alzheimer
Centros Médicos de Cercanías - Fundación Mohammed V para la Solidaridad

Innovar, Fundación Mohammed V para la Solidaridad

Actuar dentro de un proceso de innovación continua

Apoyándose en su conocimiento y en la anticipación, la Fundación consolida la cadena solidaria y mejora la eficacia de los servicios prestados. Cobija las nuevas necesidades de la población afectada, y orienta su acción hacia nuevos resortes. Sus respuestas se refuerzan, con el paso de los años, mediante la iniciación de acciones complementarias o por el paso a otros niveles de intervención.

La cuestión de la discapacidad ilustra perfectamente este modus operandi. La Fundación empezó apoyando a los agentes asociativos dedicados a esta materia. Aportó ayuda técnica material, equipamientos, prótesis... Pero, poco a poco, vió que la discapacidad no se limitaba solo a eso. Favorecer la inserción de los discapacitados, pasaba por el acompañamiento social, la asistencia sanitaria y la formación.

Así es como la Fundación experimentó, en colaboración con la Oficina de Formación Profesional y de Promoción Laboral, los centros mixtos de formación profesional que acogen a los discapacitados motores. Este proyecto dió lugar a una plataforma dedicada, el Centro Nacional Mohammed VI de Discapacitados (CNMH): una estructura de asistencia integral (educación, salud, deporte, formación) para discapacitados físicos e intelectuales (niños y adultos).

La problemática de la exclusión de los discapacitados del mercado laboral se planteó enseguida. Una nueva iniciativa procedente del CNMH nació: el Centro de Inserción y de Ayuda Laboral Este proyecto modelo ofrece un marco laboral adaptado a los jóvenes discapacitados intelectuales formados en el CNMH.